Cuba honra a sus mártires internacionalistas en el aniversario 36 de la Operación Tributo

Hoy, como cada año, Cuba rinde homenaje solemne a los héroes internacionalistas que ofrendaron sus vidas en tierras lejanas por la patria y las causas antiimperialistas. La fecha, cargada de simbolismo, recuerda la caída en combate de Antonio Maceo en 1896 y la histórica Operación Tributo de 1989, cuando regresaron a la Isla los restos de más de dos mil combatientes cubanos caídos en África.
En la Isla de la Juventud, al igual que en toda la nación, se realiza el acto de recordación que enlaza la memoria del “Titán de Bronce” con la de sus 24 hijos internacionalistas. En aquel acto solemne en El Cacahual, Fidel inmortalizó frases que hoy siguen marcando la conciencia de los cubanos:
“Fue siempre de profunda significación para todos los cubanos la fecha memorable en que cayó, junto a su joven ayudante, el más ilustre de nuestros soldados, Antonio Maceo.”
“Hoy, junto a los restos de Maceo, descansan también los restos de nuestros internacionalistas caídos, que escribieron páginas gloriosas de solidaridad y heroísmo.”
“La sangre derramada por nuestros combatientes en tierras africanas no fue en vano: contribuyó a la independencia de Angola, a la derrota del apartheid y a la libertad de Namibia.”
Estas palabras, pronunciadas por el líder histórico de la Revolución, se han convertido en un legado de dignidad y continuidad. Los mártires internacionalistas son recordados como parte inseparable de la historia de Cuba, de la firmeza de su pueblo y de la vocación solidaria que ha caracterizado a la Revolución.
Hoy, 7 de diciembre, los estudiantes, instituciones y plazas de todo el país se llenan de flores y banderas para reafirmar que el sacrificio de los caídos sigue iluminando el camino de la patria. La Operación Tributo permanece como símbolo eterno de solidaridad y resistencia frente al imperialismo, y como recordatorio de que la sangre derramada por Cuba y el mundo nunca ha sido en vano.
Texto e infografía Ana Verdecia
