Día Universal del Niño
El 20 de noviembre se celebra el Día Universal del Niño, una fecha en la que también se conmemoran los aniversarios de la adopción de la Declaración Universal de los Derechos del Niño (1959) y la aprobación de la Convención de los Derechos del Niño (1989).
La Convención de los Derechos del Niño es el más universal de los tratados internacionales. Contiene 54 artículos que recopilan los derechos económicos, sociales, civiles, culturales y políticos de todos los niños, niñas y adolescentes.
La aplicación de esta Convención es de carácter obligatorio para los 194 Estados que la han ratificado a nivel mundial, definiendo las obligaciones y responsabilidades de padres, maestros, profesionales de la salud, así como de los niños y niñas.
Pese a ello, 385 millones de niños viven en la pobreza extrema, 264 millones no están escolarizados y 5,6 millones de niños menores de cinco años murieron en el 2020, por causas que podían haberse prevenido.
La celebración de este día a escala universal es una oportunidad para promover en las escuelas, en la sociedad en general y en los gobiernos, que todos los niños y niñas estén protegidos, seguros, con salud y educación, independientemente del lugar de su nacimiento, procedencia o situación económico-social.
Es una oportunidad para hacer un llamamiento a las necesidades de los más pequeños, así como a reconocer la labor de las personas y profesionales que trabajan a favor de los niños y niñas.
El Estado cubano ha mostrado una fuerte voluntad política para garantizar el adecuado desarrollo y bienestar de los niños, especialmente en relación con la cobertura educativa y la atención a la salud materno-infantil.
La tasa neta de matrícula en la enseñanza primaria es del 99.1%, y la tasa bruta de escolarización en la educación secundaria del 96.4%, con altos índices de paridad de género en todos los niveles de enseñanza. Por otra parte, todos los nacimientos son registrados y un 99.9 % de los mismos ocurre en instituciones de salud, asistido por personal calificado.
En 2015, Cuba se convirtió en el primer país del mundo que ha sido certificado como libre de la transmisión materno-infantil del VIH y la sífilis congénita.
La atención a niños con alguna discapacidad es prioritaria en la política social dirigida a elevar su calidad de vida y la igualdad de oportunidades.
El Ministerio de Educación y otras instituciones, en vínculo con las familias y comunidades, han comenzado a aplicar otras variantes de inclusión socio-educativa, con la incorporación de niñas, niños y adolescentes con discapacidades a las aulas de enseñanza regular en los niveles preescolar, primario y secundario, así como en el programa “Educa a tu hijo”.
Más de 400 niños y niñas sin amparo familiar viviendo en instituciones (hogares para niños y niñas sin amparo familiar). Estas son regidas por el Ministerio de Educación, fundamentalmente a través de las direcciones de Educación Preescolar y Especial.
El Estado aporta recursos humanos, materiales y financieros para que la vida en ellas se desarrolle de la manera más cercana posible a las condiciones de un hogar familiar, con número reducido de niños y niñas (no más de 20).
La aprobación en Cuba del nuevo Código de las Familias protege a los niños y niñas de todo tipo de violencia y discriminación intrafamiliar, y respeta su autonomía progresiva y su interés superior, mediante la sustitución del concepto de patria potestad por el de responsabilidad parental.
Por: Sergio Rivero