marzo 19, 2025 ¿Quienes somos?

En el Centenario de la ratificación del Tratado Hay Quesada: Lo acontecido en 1903

El programa por el Centenario de la ratificación del Tratado Hay-Quesada hace necesario tener presente lo acontecido en el año 1903 donde como resultado de las presiones norteamericanas, las " negociaciones" culminarían ese año con el acatamiento por la parte cubana del Tratado de Reciprocidad Mercantil y el Tratado de Relaciones Permanentes.
En este último, en el Articulo No. 1, se hace mención a que los EEUU renunciarían a todo derecho sobre Isla de Pinos; y en el Artículo No. 2 precisaba por qué aceptaban el contenido del artículo anterior: " está renuncia…se hace en consideración a las concesiones de estaciones carboneras y navales en la Isla de Cuba que antes de ahora se han hecho a los Estados Unidos de América". Era cuestión de cambiar una parte del archipiélago por otro, como acontece hasta el presente con la ocupación de la base naval de Guantánamo.
Como resultado del trabajo diplomático de Gonzalo de Quesada y Aróstegui, entonces Ministro Plenipotenciario de Cuba en EEUU, se firmó en La Habana, el 2 de julio de 1903, un primer tratado sobre Isla de Pinos rubricado por el Secretario de Estado interino de Cuba, José María del Monte, y el Ministro Plenipotenciario de EEUU en Cuba Herbert G. Squiers.
La inclusión de una cláusula, donde señalaba su caducidad si en 7 meses no era ratificado por el Senado norteamericano, condujo a su fracaso.

Nuevamente, el 2 de marzo de 1904, Gonzalo de Quesada lograba un nuevo acuerdo con el Ejecutivo norteño, en esta ocasión con el Secretario de Estado norteamericano, John Hay; que es identificado como Tratado Hay -Quesada, similar a su primera versión, pero sin la cláusula de caducidad. Por ello demoró casi 21 años su ratificación por el Senado, a pesar de que desde el año 1907 el poder judicial reconociera la jurisdicción cubana sobre Isla de Pinos, de que el poder ejecutivo lo considerara oportuno, y la propia Comisión de Relaciones Exteriores del Senado: la división de poderes permitió la construcción de un fuerte lobby a favor de los colonos en Isla de Pinos, muy a tono con iniciativas legislativas favorables a la anexión de otros territorios bajo control económico de ciudadanos norteamericanos. Hasta 32 norteamericanos también reclamaban la posesión de Cayo Ávalos en la costa Norte de Cuba.

La designación del coronel del Ejército Libertador, y en ese momento presidente de la Asamblea General de la Liga de Naciones, Cosme de la Torriente y Peraza, como primer embajador en EEUU el 4 de octubre de1923, les ofrece un nuevo impulso a las negociaciones oficiales, mientras que el pueblo hace suya la causa pinera y evitar lo que con Guantánamo: aunque de hecho Isla de Pinos siempre fue cubana, era decisivo que también lo fuera de “Derecho”.


Texto e imágenes Roberto Unger Pérez

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