La escultura del restaurante “El Rio”

Todos los días hago mi recorrido desde el reparto Chacón hasta mi centro de trabajo en Nueva Gerona, pero al cruzar el puente de la ciudad advierto que a la entrada del restaurante El Río se alza la figura de un delfín que decora el jardín del centro gastronómico y recreativo.
Siempre me llamó la atención, pues ya hace algunos años la presencia de esta escultura permanece en aquel lugar y muchos me han preguntado sobre ella y su autor.
Como nuestra Oficina de Monumentos y Sitios Históricos tiene además el encargo de llevar los inventarios de estas obras, se juntó mi curiosidad natural con el accionar del trabajo diario y comenzaré a exponerle todo aquello que encontré relacionado con esta obra artística.
El artista de la plástica Gregorio Prudencio Placeres González es el creador de este trabajo y seleccionó la imagen de un delfín, como símbolo del amor, para que todos los pineros la disfrutaran en su tránsito cotidiano por esta zona tan recurrida.

La escultura de 2 metros de altura está cimentada en una base de hormigón que le da seguridad a la figura, además de mantenerla con la cabeza erguida.
En un artículo del periódico local de octubre de 2007 se expone “de colores blanco y gris, echará agua por su largo pico, además que brotará en la fuente donde estará ubicada; sus ojos son dos focos rojos incandescentes con mayor intensidad en la noche, acotó el artista mientras laboraba en la obra”.
Placeres Gonzáles, a partir de 1980 comenzó a realizar obras desde el modelado y el tallado para luego continuar una línea en piedra, mármol, madera, yeso, cerámica, plástico, cemento, marfil, tarro, entre otros materiales.

Con anterioridad ya había incursionado en animales como una aguja y una cotorra, esta última identificaba las aguas mineromedicinales de Santa Fe.
Su huella ha quedado en la pizzería La Góndola, el restaurant El Cochinito, en la desaparecida Casa del vino y en otros centros gastronómicos. Además, este artista ha elaborado diversas obras de carácter municipal y nacional.
Hoy la estatua del delfín se mantiene erguida contra viento y marea, pero está descuidada y necesita urgente atención. Su esplendor ya lo ha perdido y hay que recuperarlo, hoy en día en que se acometen trabajos de remodelación del centro gastronómico. Quedaría, así como símbolo del lugar, pues su creación estuvo inspirada en el amor que representa y tiene que tener el cuidado que merece: que funcione como fuente de agua, que sus ojos destellen y que sus colores se destaquen como lo concibió su autor.
Estas obras tenemos que preservarlas, pues constituyen un eslabón del patrimonio artístico pinero.


Nota curiosa:
Los delfines son pequeños cetáceos con dientes; generalmente el nombre de delfín se emplea para los de hocico largo o pico. Son animales marinos que viven en las aguas templadas de los océanos Atlántico y Pacífico generalmente, su cuerpo es aerodinámico con pequeñas aletas.
Por: Lic. Guillermo F. Maquintoche Vázquez.
Fotos: archivo personal.