Eternamente de la Isla de la Juventud
La sección está dedicada hoy al Aniversario 46 de la proclamación de la Isla de la juventud, momento especial en el que por mandato de la Asamblea Nacional del Poder Popular, a una convocatoria de Fidel a los jóvenes que aquí transformaban esta ínsula, se hiciera realidad este hecho único que abrió el camino de la esperanza y el trabajo creador, de la transformación y la vida.
Les entregamos una crónica dedicada a este cumpleaños de la Isla de la juventud
Esta Isla de ensueños, enamorada de la vida y del amor nació bendecida por la eterna juventud, las aguas, la belleza y la pasión; bendición que trasciende el tiempo madurando y no envejeciendo, como vaticinó el Apóstol, ese que sanó aquí las heridas del alma y del cuerpo, que conoció a profundidad la lealtad, la devoción y la justicia, y con ello multiplicó el deber, expuesto en el “Presidio Político en Cuba”, que al decir de los estudiosos, tuvo sus cimientos e inspiración mientras sanaba también sus heridas aquí.
Del mismo modo es la Isla de Fidel, el mejor discípulo del Maestro, el que traspasó con el pensamiento glorioso y revolucionario las rejas de Presidio, e hizo volar el mensaje de libertad definitiva de la nación a todos los confines, transitando en la lucha desde el exilio hasta la liberación definitiva del yugo dictatorial que existía en Cuba al servicio del imperio.
Ellos, muy jóvenes, legaron la responsabilidad de hacerla crecer bella y radiante a sus semejantes etarios con la fuerza transformadora de las ideas, de las sociedades y del mundo todo. Aquí llegaron los jóvenes en oleadas de contingentes cuando esta ínsula estuvo arrugada por el paso del devastador Alma, pero ellos creyeron en destrozos; edificaron una sociedad con nuevos valores, levantaron esperanza y provenir, enaltecieron la dignidad de esa nueva descendencia que será un eterno orgullo.
Ya Fidel, en un histórico encuentro con los jóvenes que laboraban aquí en la inauguración de la presa Viet-Nam, con la que se iniciaba la Voluntad Hidráulica en la Isla, les dio la misión de transformar la Isla, no solo físicamente, también en el pensamiento, el uso de la ciencia y el amor. Solo sembrando mucho amor se podían recoger los frutos esperados después de tanto esfuerzo y dedicación.
Entonces no fue por azar que en el entorno del XI Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes celebrado en Cuba, aquel sueño se haya hecho realidad, y por mandato y reconocimiento del Parlamento cubano, recibiera el 2 de agosto de 1978 el ansiado nombre de Isla de la Juventud; que no quedó solo en eso, sino que representó la dimensión de un profundo concepto humano, revolucionario y multiplicador de valores como había apuntado Fidel: “Llamémosle Isla de la Juventud cuando la Juventud aquí haya hecho algo grande…. Haya cambiado la naturaleza, la sociedad y el pensamiento”.
Fue así que esta Isla con el bien ganado nombre “de la Juventud” hace precisamente hoy 46 años, devenido concepto para crecer y avanzar, para amar y juntar derrochando belleza y abrazando a cuántos hijos vinieron a su encuentro y decidieron quedarse para adorarte cada día, desde aquí o desde lejos, pero con la certeza de que ninguno puede hoy vivir en su tranquilidad sin el reconfortador recuerdo de su Isla y el interés de entregar todo por su Isla.
Es este el momento propicio para que la juventud, sobre todo, y este aguerrido pueblo, continúen volcándose para ponerle corazón a la Isla, para emprender nuevos proyectos en favor del Movimiento “Sentir Pinero”, y continuar trabajando Por Un26EnEl24.
Redacción Web