Tributo y honra a los mártires desde el corazón de la Patria
“Los muertos son las raíces de los pueblos,
y, abonada con ellos la tierra, el aire nos los
devuelve y nutre de ellos".
José Martí
Suman ya 34 jornadas en las que el pueblo cubano honra postrer tributo a los mártires junto al que ya se realizaba al Titán de Bronce, haciendo realidad el concepto de que en Cuba se ha producido una sola Revolución y a ella se han entregado nuestros muertos en gesto altruista, desinteresado y profundamente patriótico.
El pueblo de la Isla de la Juventud guarda en su memoria viva con profundo sentir, el ejemplo y presencia de los 24 mártires internacionalistas que honran el umbral de la patria. Sublimes seres humanos y revolucionarios cabales, que derrocharon amor por los suyos, se lanzaron con ese mismo ímpetu y el pecho erguido, a liberar a otros pueblos de la ignominia y la explotación de las potencias extranjeras que las mantenían bajo su bota.
En el aniversario 34 del inicio de la Operación Tributo, nombre que se le dio al proceso de traslado hacia el territorio nacional a los restos mortales de los cubanos caídos en misiones internacionalistas principalmente en países de África, tenemos presente más que siempre a Gilberto Pico, Leonilda Tamayo, Roberto Orestes Moreno, Angel Alberto Galañena, Rodolfo Carballosa, Melecio Hechavarría, Raidel González, Roberto Lafita, Rafael Ávila, Richard Ebanks, Pedro Bueno, Ramón Herrera, Richard Terrero, Orlando Gutiérrez, Carlos Reyes, Carlos Torres, Nelson Machado, Leonardo Azahares, Arístides Domínguez, Carlos Betancourt, Alexis Hechavarría, Ramón Fernández, Máximo Caignet y Rodolfo Codorniú, dignos representantes de la estirpe de Maceo, de esos hombres y mujeres que entregaron sus vidas por ver libres y próspera a su Cuba.
Con Maceo, los cubanos también rendimos tributo a los héroes de todas las batallas, a los que iniciaron la lucha por la Independencia el 10 de octubre de 1868 hasta nuestros días. Las más jóvenes generaciones beben de ese ejemplo inmortal, de la eternidad compartida por los mártires internacionalistas y el Titán de Bronce para estar presentes en cada momento de ímpetu patriótico, demostración de hidalguía y devoción. Y es que cuando hacemos referencia al Titán de Bronce, al General Antonio Maceo Grajales y su ayudante Panchito Gómez Toro en este aniversario 127 de su caída en combate, encerramos en ellos toda la grandeza y heroísmo que haya marcado a los héroes de nuestras luchas independentistas y a los cubanos ilustres por tres razones fundamentales: el lugar que cada uno ocupa en nuestra historia, su obra revolucionaria y la influencia que ejerce su ejemplo en nuestra conciencia.
Por tales razones cada siete de diciembre el pueblo pinero les rinde los más altos honores y ensancha su corazón junto a los familiares con la convicción de que siempre viviremos orgullosos de nuestra historia y fieles a la idea martiana de que cada hombre debe sentir sobre sí toda la carga del Universo. Nuestros mártires sagrados nunca serán olvidados y vivirán eternos en el corazón de la Patria.
Fragmentos del histórico discurso de Fidel un 7 de diciembre de 1986.
Texto y foto Sergio I. Rivero Carrasco